Madrid, 15 de enero de 1968
A los compañeros de la SOCIEDAD VECINAL DE FOMENTO “NUCLEO DE
VECINOS UNIDOS” Barrio Obrero “Cal Molinedo “. Don Carlos Alberto
Imperatrice y Don José Rodolfo Medina Valentín Alsina (Lanús O.)
Mis queridos compañeros:
Por intermedio del Secretario General del Peronismo, Mayor D. Bernardo Alberto,
he recibido vuestra comunicación del 31 de diciembre pasado y les agradezco el
recuerdo y el saludo que retribuyo con mi mayor afecto.
En primer término les hago llegar mi encomio por la posición firme al lado del
conductor táctico del Movimiento compañero Alberto quien tiene la
responsabilidad de todas las acciones allí y, en consecuencia, toda la autoridad que
necesita para defendernos, su responsabilidad ante el Comando Superior.
Nuestros enemigos han conseguido en parte meter la disociación en el Movimiento,
más que nada merced a algunos de nuestros propios dirigentes que, olvidando sus
deberes, atraídos por intereses personales o de círculo, pretenden realizarse en un
peronismo que no se realice, sin percatarse que ese es el seguro camino de su
propia destrucción. Ellos son los peores enemigos y los más peligrosos porque los
tenemos metidos adentro y nada debemos dejar de hacer para destruirlos, antes
que ellos puedan perjudicar al Movimiento. Empeñado en esa tarea, el compañero
Alberto, merece el apoyo irrestricto de todos los Peronistas de buena fe que
sinceramente anhelan el triunfo del Peronismo. Por eso veo con sumo placer la
posición de Ustedes en contacto permanente con él que, si el Comando Superior lo
ha designado, ha de ser por algo.
Les felicito por haber alcanzado ya la organización de que me hablaban en cartas
anteriores. Si la política de la dictadura militar que está azotando al país es
dedicarse a la política comunal, nada más acertado de nuestra parte que oponerle
en las comunas organizaciones como la formada por Ustedes que han de
presentarle batalla allí donde ellos pretenden dominar. Si la dictadura y los demás
no hacen llegar la ayuda que tienen obligación de arrimar a los barrios y zonas
azotadas por el infortunio, es porque a nadie le interesa ayudar. Ello les dará a
Ustedes oportunidad para ayudarse a si mismos, lo que pondrá en evidencia las
diferencias que existen entre ellos y nosotros. Si las “autoridades” no cumplen su
deber, tanto mejor, habrá llegado el momento de hacérselo notar públicamente y
reemplazarlos en lo posible con vuestras propias organizaciones.
Les adjunto las fotografías que me encargan. Les ruego que hagan llegar, junto con
mi saludo más afectuoso, a todos los compañeros de la Sociedad Vecinal mis
mejores deseos para el año que se inicia, como asimismo el agradecimiento y
saludo de Isabelita.
Un gran abrazo.
Juan Perón